El principal icono turístico del centro de la ciudad será iluminado nuevamente, luego de que antisociales hurtaran el cableado y deterioraran el sistema eléctrico.
Durante la presente semana las cuadrillas de obreros de la Corporación Merideña de Turismo (Cormetur) ejecutan los trabajos técnicos que permitirán que, de nuevo, la plaza Bolívar de la ciudad de Mérida muestre su esplendor en las horas nocturnas.
Como se recordará, los cables de electricidad y los bombillos de la plaza mayor fueron robados, por lo que este espacio emblemático y de concurrida asistencia, había quedado a oscuras y en manos de la delincuencia. Es por ello que bajo las directrices del gobernador Ramón Guevara, en lo que respecta a la recuperación de los parques y plazas de la ciudad capital, Cormetur procedió conjuntamente con la dirección de Administración de la Gobernación de Mérida, a ejecutar los trabajos que permitan devolver a los merideños una plaza Bolívar luminosa y segura.
La presidenta de Cormetur, Eva Yánez, explicó que la primera fase conllevó a la recuperación de las luminarias, así como el cableado; la segunda fase consistió en la rehabilitación con la recuperación de las bancas, pintura, ornato y embellecimiento para tener una plaza digna y representativa de lo que es el estado Mérida y la “merideñidad”. En lo que respecta al área central, donde se encuentra la estatua ecuestre del Libertador, en ese sector hubo un robo total de los cables y se hizo nuevamente la electrificación y empalme eléctrico.
La titular de Cormetur dio a conocer que lo más costoso fue la compra del cable eléctrico ya que los bombillos fueron adquiridos a algunos empresarios que dieron unos precios muy solidarios, como parte de su contribución y aporte para lograr esta recuperación, a quienes agradeció en nombre de los ciudadanos de Mérida.
Uno de los problemas que se presenta en la plaza Bolívar es que la fluctuación del voltaje de electricidad, como en toda Mérida, no está acorde con lo que se requiere, lo que conlleva a inconvenientes con las luminarias.
Prensa OCI
