El acaparamiento, la especulación de
productos básicos, la puesta en marcha de acciones terroristas, y la
intensificación del contrabando de extracción, forman parte de la estrategia
dentro de la guerra económica puesta en marcha por grupos económicos vinculados
a organizaciones polÃticas y mafiosas, para quebrar al pueblo por la vÃa de la
alimentación.
Frente a este escenario, la polÃtica
económica nacional está orientada en esta nueva a incrementar la producción
interna, para generar la suficiente oferta de insumos capaz de atender la
demanda de la población, señaló Ricardo Sanguino, durante el espacio Debate de
Ideas, que transmite El Informativo de Radio Nacional de Venezuela.
Venezuela destacó dispone de una
infraestructura industrial y agrÃcola, en proceso de recuperación, por la vÃa
del financiamiento a diversos proyectos, sector que fue destruido con la puesta
en marcha de la polÃtica neoliberal en la cuarta República.
Sanguino comentó que en el marco de la guerra
económica el cuadro de apoyo creado por Hugo Chávez, con el desarrollo de una
sólida red de educación (desde inicial a universitaria), y una red de
alimentación a través de Mercal, Pdval y Abastos Bicentenario, está en el
centro de los ataques.
Chávez recordó el diputado cuando informó
sobre su padecimiento de salud al paÃs, advirtió sobre la intensificación de las
acciones de los enemigos de la Revolución, para doblegar al pueblo.
Para el Gobierno Nacional la alimentación del
pueblo es un derecho constitucional, asintió al recordar que cuando la
Revolución llegó al poder la pobreza estaba por el orden de 60 por ciento,
sector que estaba excluido del acceso a los alimentos, servicios y bienes
esencial para el vivir bien es básico, que ahora ha sido incluido.


