La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y
la Organización Panamericana de la Salud (OPS) hacen seguimiento a la situación
del ébola en el mundo, a fin de evitar su propagación en la región.
La información la dio a conocer el secretario
general de Unasur, Ernesto Samper, a través de su cuenta en la red social
Twitter @ernestosamperp.
El último balance de la Organización Mundial
de la Salud (OMS), divulgado el viernes pasado en Ginebra, revela que el virus
del ébola ha provocado la muerte a más de 4 mil personas.
El organismo ha estimado que las dos vacunas
que probablemente sean elegidas como un sistema de inmunización contra el virus
del ébola estarán listas para principios de 2015.
Guinea, Liberia y Sierra Leona, todos en
África Occidental, son los más afectados por el brote del virus, mientras que
en Alemania, Estados Unidos y España se han registrado casos puntuales.
Los ministros de Salud de la Alianza
Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (Alba) se reunirán la próxima
semana en Caracas para acordar medidas de seguridad conjuntas que impidan su
propagación en la región.
El ébola es una enfermedad viral, con una
tasa de mortalidad de hasta 90 por ciento. Los primeros síntomas de la afección
incluyen la aparición repentina de fiebre, debilidad y dolores musculares, de
cabeza y de garganta. Más tarde progresan a vómitos, diarrea, alteración de la
función renal y hepática y hemorragia.
El virus se propaga a través del contacto con
los órganos y fluidos corporales tales como sangre, saliva, orina y otras secreciones
de las personas infectadas.


