El presidente francés, Emmanuel Macron, estimó este viernes que la "amenaza" terrorista en Francia sigue siendo "alta" tras una toma de rehenes que se produjo por la mañana en el sur de Francia, con un saldo de tres muertos.
"Un ataque y una toma de rehenes se produjeron esta mañana (...) todo indica que se trata de un ataque terrorista", declaró Macron en una rueda de prensa en Bruselas, en su primera reacción a este atentado que dejó tres muertos.
"Estaré en unas horas en ParÃs para seguir y coordinar todas las medidas", añadió el mandatario, que se encontraba en la capital belga para una cumbre europea.
Emmanuel Macron señaló además que la amenaza "terrorista" que pesa sobre Francia sigue siendo "alta". "Nos enfrentamos desde hace varios meses a una amenaza endógena", afirmó.
El ataque, perpetrado por un joven marroquà de 26 años en las localidades francesas de Trèbes y Carcasona (sur), fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico.
Según fuentes próximas a la investigación, el sospechoso robó primero un automóvil en Carcasona, matando a un pasajero e hiriendo al conductor, antes de herir con bala a un policÃa.
Después mató a dos personas durante una toma de rehenes en un supermercado en Trèbes, antes de ser abatido.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, al igual que otros lÃderes europeos, expresó este viernes su "pleno apoyo" a Francia tras este ataque, el primero importante desde la elección de Macron en mayo pasado.
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, expresó también su solidaridad con su vecino. "No bajaremos nunca la guardia en la lucha contra el terrorismo", apuntó.
La canciller alemana, Angela Merkel, expresó su simpatÃa con las familias de las vÃctimas, a quienes aportó su pésame. "Cuando se trata de amenazas terroristas, estamos naturalmente al lado de Francia".
El anterior ataque reivindicado en Francia por el EI tuvo lugar en Marsella el pasado 1 de octubre. Ese dÃa, un tunecino de 29 años mató a dos jóvenes ante la estación Saint-Charles de la ciudad meridional al grito de "Alá Akbar" ("Alá es el más grande"), antes de ser abatido por militares.
AFP
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