Obispo Luis Rondón cúpula de la iglesia
Romana en Mérida no cree en el diálogo
Agustin Volcanes
Foto. AV
A pesar de la postura del máximo jerarca de la Iglesia Católica Romana, el Papa Francisco, quien ha promovido para Venezuela una “mesa de diálogo” donde coincidan los factores de la revolución y de la oposición, para dilucidar planteamientos que favorezcan una superación a la crisis nacional, se observan posturas adversas a esta iniciativa papal.
Asà lo estima el obispo Luis Rondón de la Diócesis anglicana San Esteban de Mérida, quien resaltó la postura del recién nombrado Cardenal, Baltazar Porras, al señalar que “no hay una señal de que el diálogo vaya por buen camino”, lo que demuestra que este prelado de la Iglesia Romana en la entidad, asume una postura polÃtica que coincide con el discursos de la oposición.
“Yo creo firmemente en el diálogo, el cual no se agota en un par de reuniones, es una acción constante, pero que debe coincidir con la sinceridad, el respeto y en posturas regidas por la legalidad, más aún cuando hemos observado como el gobierno, desde el presidente Chávez y hasta el presidente Maduro, se han planteado una opción primordial en favor de los pobres y esa es una firme enseñanza cristiana”, dijo.
Para Monseñor Rondón la Iglesia Católica Romana en Mérida siempre ha favorecido a los factores de la oposición y, por coincidencia, pareciera favorecer salidas extra constitucionales y violentas, en el derrocamiento del presidente constitucional Nicolás Maduro, postura que dista de un pensamiento cristiano progresista.
Por otra parte, recordó la visión del recién fallecido lÃder cubano Fidel Castro, quien en una oportunidad resaltó que la revolución no es contraria a la que predicaba Jesús, sino una verdadera coincidencia de interés por los más necesitados y desamparados, es predicar con el testimonio de la vida que se lleva y no utilizar la teologÃa para manipular al pueblo.
Finalmente, el obispo anglicano Luis Rondón destacó lo expresado por el enviado del Vaticano, Monseñor Celli, quien reconoció la postura del gobierno nacional y de la oposición y reafirmó el compromiso con el diálogo, el cual debe continuar el próximo año, sin condicionamientos como los que ya factores violentos pretender imponer para promover una salida violenta del gobierno legalmente constituido.

