El Consejo Nacional Electoral (CNE), cumple de forma responsable con los procesos de cada sufragio para respetar el derecho y voluntad de los venezolanos, destacó este jueves la vicepresidenta del ente comicial, Sandra Oblitas.
“El Consejo Nacional Electoral no recibe presiones ni de uno ni de otros, de nadie. Tiene sus procesos, los tiene claramente establecidos con mucha seriedad y además, siempre, ante cada proceso se levantan actas”, aseguró durante una entrevista concedida al canal privado Globovisión.
Recordó que el CNE cuenta con tres órganos: La comisión de participación polÃtica y financiamiento la comisión de registro civil electoral, y la junta nacional electoral; que es la encargada de “realizar las propuestas de cronogramas de ejecución para procesos de carácter electoral”.
Oblitas informó que aún no se ha ni solicitado la convocatoria, ni se ha activado un posible referendo revocatorio presidencial, ya que que actualmente se lleva a cabo el proceso de legitimación de la organización polÃtica autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) como representante de los electores.
“En este momento todavÃa no se ha solicitado la convocatoria, ni la activación de un referéndum revocatorio; en este momento estamos en la fase de legitimación de una organización con fines polÃticos, como mediadora de los ciudadanos, que son quienes tienen derecho para la activación de del artÃculo 72 de la Constitución”, explicó.
Asimismo, se desarrolla la fase de validación, digitalización y digitación de las firmas del 1% que la MUD dijo haber presentado como primer requisito para activar el referendo.
Este proceso cuenta con la participación del cuerpo de ingenieros y técnicos de la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) y del Gran Polo Patriótico (GPP) que trabajan junto a los especialistas del CNE.
Con respecto a la segunda fase para activar el referendo, la rectora recordó que para ello es necesaria la recolección de 20% de las firmas del padrón electoral que los ciudadanos validan el mismo dÃa de su manifestación de voluntad.
T/AVN