Por Ramón Lobo
Nicolás Maduro como buen
hijo del Comandante Chávez, formado bajo sus enseñanzas y el fragor de las
luchas populares ha demostrado en 100 dÃas la capacidad y entrega requerida para
seguir avanzando en la edificación de la Patria Grande. La labor como era de
esperarse no ha sido nada fácil, en primer termino, le correspondió enfrentar el
terror fomentado por el excandidato perdedor, quien de manera irresponsable
manipulo a sus seguidores para que vertieran su “arrechera” en actos violentos
que produjeron un saldo lamentable de 11 muertos y un centenar de heridos.
Quisieron continuar los fascistas cuando convocaron la marcha al CNE,
escondiendo sus verdaderas intensiones que era desviarla a Miraflores, tal como
lo hicieron el 11 de abril del 2002. El primer mandatario, con coraje, rectitud
y aplomo no permitió que el caos reinara en Venezuela, y negó la marcha.
Sin descuidar el golpe
de estado que promovÃan sectores de la derecha con apoyo estadounidense inicia el
mandato conferido por el Pueblo, recorriendo el paÃs con su Consejo de Ministros
para atender directamente los planteamientos de la colectividad; partiendo de lo expresado en el Plan de la
Patria y asumiendo con esta polÃtica la orden del Comandante Supremo Hugo
Chávez, gobernar siempre obedeciendo al pueblo. Asà nace el Gobierno de Calle, permitiendo
en poco tiempo la atención de todos los Estados. Un despliegue total en la articulación
eficientemente de la acción nacional con los gobiernos locales, regionales y el
poder popular.
Al mismo tiempo, enfrenta
la guerra económica propiciada por la derecha apátrida, dirigentes partidistas
y sectores empresariales que participaron en el golpe de estado y paro patronal
del 2002; quienes nuevamente promueven el acaparamiento, desabastecimiento y la
especulación general, intentando crear condiciones para un estallido social. Estos
sectores son los responsables de los altos niveles inflacionarios que golpean a
nuestro pueblo. El gobierno está combatiendo y venciendo nuevamente este golpe económico, que ponen una
vez más en marcha los fascistas. En un corto plazo estará normalizada la
situación económica, con proyecciones positivas sustanciales para el segundo
semestre de este año.
De igual manera, el Presidente Nicolás Maduro a girado instrucción
de atacar con mano “dura y cerrada” la corrupción venga de donde venga, poniendo
en práctica una vez más, las ordenes del Comándate Chávez, de enfrentar esta terrible perversión que
caen hombres y mujeres que tienen responsabilidad administrativa en el Estado. También
en lo internacional hemos vencido, no hay ningún paÃs del mundo que ponga en
duda la voluntad del Pueblo Bolivariano y Chavista expresada el 14 de Abril; al
punto que hoy, ejercemos la presidencia protempore de MERCOSUR.
Como vemos, la agresión
contrarrevolucionaria encabezada por el fascismo amarillo y el imperialismo norteamericano
ha sido derrotada. Sin embargo, no podemos descuidarnos, por el contrario
debemos estar atentos ante cualquier acción desestabilizadora. El destino de
los procesos libertarios que hoy recorre nuestra América esta en juego; las
declaraciones de Samantha Power, (postulada para el cargo de embajadora de los
EEUU ante la Organización de las Naciones Unidas), asà lo demuestran. La misma
se comprometió en una audiencia ante el Comité de Relaciones Exteriores del
Senado estadounidense de “responder a la represión a la sociedad civil que
se está produciendo en paÃses como Cuba, Irán, Rusia y Venezuela”.
La Revolución Bolivariana y Chavista, exige de sus hombres y
mujeres, comprensión, unidad y, apoyo
sólido a nuestra gestión gubernamental, fortalecimiento a la organización del
Pueblo en defensa y profundización de la revolución. Nuestro Presidente Nicolás
Maduro, ha demostrado su vocación y compromiso, vamos a acompañarlo firmemente en
la tarea asignada por el Comandante Chávez, ¡Construir la Patria Socialista!
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