Diputado Marquina: Venezuela
privilegia
relaciones con países "no civilizados"
Como un desacierto en las
relaciones internacionales, calificó este lunes el diputado de la tolda de
derecha, Un Nuevo Tiempo, Alfonso Marquina, a la política exterior del gobierno
venezolano, orientada hacia la búsqueda de un mundo multipolar y a la
integración socio económica con los países de la región.
Entrevistado en el programa Regiones,
que transmite Televen, Marquina afirmó que la política internacional de
Venezuela durante el gobierno de Hugo Chávez, ha privilegiado "relaciones
con aquellos gobiernos que son entre comillas catalogados, por lo menos, como
no civilizados o no democráticos del mundo".
De esta manera, el diputado a la
Asamblea Nacional, descalificó a las naciones con las cuales Venezuela mantiene
acuerdos de cooperación en los cinco continentes, haciéndose eco del discurso
de países como los Estados Unidos, que catalogan a Cuba, Irán, Rusia y otros
como partes de un supuesto "eje del mal".
Marquina, quien apoya la
candidatura de Henrique Capriles, caracterizada como "novedosa" y
desligada de lo "viejo"; defendió la postura tradicional de los
gobiernos de la Cuarta República, quienes relacionaron a Venezuela solo con los
llamados "mercados del espacio natural", es decir, Estados Unidos y
Colombia, por su cercanía geográfica, en detrimento de otros países del
continente y del mundo.
"Aquí definitivamente el
desacierto de las políticas internacionales de este gobierno nos ha llevado a
alejarnos o a deteriorar las relaciones con aquellos países que han sido
nuestros socios tradicionales con los que tenemos ventajas comparativas y
competitivas", explicó.
El parlamentario consideró que el
comercio y la integración con "mercados tradicionales" es la propicia
para el país, pero señaló que la apertura hacia América Latina, especialmente a
Suramérica, con la entrada de Venezuela al Mercado Común del Sur (Mercosur),
solo generará "desventajas para el sector productivo nacional y mayor
desempleo y pobreza".
A juicio de Marquina, Venezuela
se integraría de forma natural a un mercado como el norteamericano, sin embargo
considera que la industria nacional no posee condiciones suficientes para
competir con mercados como el brasileño o el argentino, considerablemente
menores al estadounidense, en términos de producción.
De esta manera, la derecha deja
ver su programa, que ofrece una vuelta a las políticas liberales de comercio
internacional, y el privilegio de relaciones con Estados Unidos, por encima de
los procesos de integración con países de América Latina, el Caribe, Asia,
África y Europa, que garantizan la ampliación de los mercados y la posibilidad
de desarrollo en un mundo multipolar.
AVN