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Construcción del Hospital IV ha generado casi 300 empleos en El Vigía

 
*** El nombre del hospital está siendo sometido a la consideración de los consejos comunales.
La construcción del hospital tipo IV en El Vigía es un obra de envergadura en cuya ejecución se han articulado los diferentes niveles de gobierno: nacional, con la inversión del Ministerio del Poder Popular para la Salud, a través del presidente Chávez; regional y municipal, por medio de las gestiones del gobernador Marcos Díaz Orellana y del alcalde Robert Ramos, respectivamente.

“Conjuntamente con la alcaldía de El Vigía, los consejos comunales y las salas de batalla se están incorporados totalmente, no solo en la función obrera, cabilleros, etc., sino además en la toma de decisiones, por ejemplo: una medida que no la estamos tomando nosotros arbitrariamente es el nombre del hospital, que está siendo sometido a la consideración de los consejos comunales, de postular nombres de personas que inmortalicen este centro asistencial en razón de sus características y su trayectoria moral y social de luchadores”, informó Díaz Orellana.

Lo más importante del proyecto, como lo destacó el mandatario merideño, es la participación del poder popular.
Tan solo durante la ejecución del movimiento de tierra y la actual colocación de los drenajes, se han generando casi 300 empleos: 70 directos y unos 200 indirectos. 

Estos detalles fueron ofrecidos por los gobernantes regional y municipal, durante la reciente visita efectuada a la obra, donde compartieron con los trabajadores. 

La conclusión de este recinto hospitalario de especialidades, no beneficiará solamente al municipio Alberto Adriani, sino a todo el Eje Sur del Lago y los siete municipios de la zona Panamericana del estado Mérida, además de Táchira y Zulia, e incluso, habitantes del Norte de Santander, en Colombia.

Testimonios

Yorvin Salas, obrero: “La obra lleva un buen arranque, va bastante aligerada. Está llegando material constantemente; somos más de 70 trabajadores y en la semana están haciendo pedidos de 15 y 20 personas más y, si Dios quiere, todos los que están afuera, esperando, van a entrar: son como 50-60 personas más que hay”. 

Denis Rondón, cabillero: “Nos sentimos orgullosos de que el gobernador nos tomó en cuenta a todos los de El Vigía. Estamos trabajando bien, como lo manda la ley. Pedimos a Dios que este hospital nos quede lujoso, porque esto es algo que nos va aquedar al pueblo para siempre”.

Rosa Monsalve, banderillera: “Los obreros estamos muy agradecidos, somos todos consejos comunales organizados, salas de batalla, comunas de construcción, comunidad organizada.

Estoy acá desde octubre. Cuando empezó el movimiento de tierra me desempeñaba afuera como vendedora de pasteles y jugos. Cuando se fue desarrollando el trabajo, hubo la necesidad de salirnos de ese espacio porque había mucho polvo y nos afectaba mucho, no vendíamos nada. Luego los ingenieros nos dijeron que nos organizáramos, y así pasó, nos organizamos y nos metieron a trabajar en la obra, eso significó mucho para nosotros”.

Autor: Mawampy Bonillo